Los principales factores de riesgo de enfermedades vasculares son:

1. Tabaquismo:
   • Cómo reducirlo: Dejar de fumar es la medida más efectiva. Existen terapias de reemplazo de nicotina, medicamentos y programas de apoyo que pueden ayudar a dejar el hábito.
2. Hipertensión arterial:
   • Cómo reducirlo: Mantener una dieta baja en sodio, hacer ejercicio regularmente, mantener un peso saludable y, si es necesario, tomar medicamentos antihipertensivos bajo supervisión médica.
3. Colesterol alto:
   • Cómo reducirlo: Adoptar una dieta rica en frutas, verduras, granos enteros y grasas saludables como las que se encuentran en el pescado, el aguacate y las nueces. Además, el ejercicio regular y, en algunos casos, la medicación son claves.
4. Diabetes:
   • Cómo reducirlo: Controlar el nivel de azúcar en la sangre mediante una dieta balanceada, ejercicio regular y, si es necesario, medicamentos o insulina. Mantener un control médico regular es fundamental.
5. Sedentarismo:
   • Cómo reducirlo: Incorporar al menos 30 minutos de ejercicio moderado a intenso la mayoría de los días de la semana. Esto puede incluir caminatas, ciclismo, natación o ejercicios de resistencia.
6. Obesidad:
   • Cómo reducirlo: Seguir una dieta balanceada y realizar ejercicio regularmente para mantener un peso saludable. En algunos casos, la intervención médica o nutricional puede ser necesaria.
7. Edad:
   • Cómo reducirlo: Aunque la edad es un factor no modificable, adoptar un estilo de vida saludable puede mitigar el impacto de la edad en el riesgo vascular.
8. Historia familiar de enfermedades vasculares:
   • Cómo reducirlo: No se puede cambiar la genética, pero sí es posible controlar otros factores de riesgo con un estilo de vida saludable y chequeos médicos regulares.
9. Estrés crónico:
   • Cómo reducirlo: Practicar técnicas de manejo del estrés como la meditación, el yoga, la respiración profunda y asegurar un equilibrio entre trabajo y vida personal.
10. Consumo excesivo de alcohol:
    • Cómo reducirlo: Limitar el consumo de alcohol a no más de una bebida por día para las mujeres y dos para los hombres.

Reducir estos factores de riesgo es clave para prevenir enfermedades vasculares y mantener una buena salud cardiovascular.